Que mejor que desempolvar la libreta digital con una actividad chula, fanática, de esquí de montaña, muy recomendable para conocer rincones muy chulos de Sierra Nevada. Vamos a ello...
Lo bueno de vivir tan lejos de la nieve, y saber que vas a ir poco o muy poco, es que lo pillas con unas ganas tremendas, y eso es lo que nos pasó el sábado 13/4/2019 después de, en mi caso, una temporada a 0.
Un día radiante de primavera con temperaturas casi invernales, y una nieve muy buena, ayudaron a que la jornada diera mucho de sí. No apareció en ningún momento la temida nieve papa (húmeda para subir y pesada para bajar) ni el calor abrasador típico de estas fechas.
Comenzábamos con unas pretensiones que a lo largo del día fueron cambiando. Salimos de Peñones, la zona alta de la estación de esquí de S.N., en dirección al Collado de Borreguiles. En ese punto quitamos pieles y nos dejamos caer hasta la zona inferior de la Arista del Tozal del Cartujo previo paso por la zona de la Laguna de las Yeguas. Un descenso rápido que nos hizo ver la buena calidad de nieve que había en la zona gracias a la nevada de poniente que había caído recientemente.
En las faldas del Cartujo, con todo el valle de Dílar a nuestros esquís, pusimos pieles y enfilamos la subida a la cima del mismo (yo con crampones en los últimos metros).
Ritual casi místico!!!
Comprobando que las pieles funcionan en el ascenso al Cartujo, suave al principio...
Y empinado después...
Espectacular paso helado en la antecima al Cartujo. Visto desde abajo...
Y desde arriba...
Desde el Tozal del Cartujo esquís en modo descenso para trazar una gran y rapidísima diagonal en la que dejamos a una lado el río Dúrcal y al otro los Tajos Altos. Pieles para hacer otra pequeña subida y, después, un nuevo descenso en diagonal para ganar la vertical del Caballo, el pico de 3000 metros más meridional de España y una de las montañas más visitadas de la Sierra, sobre todo cuando está en unas condiciones tan óptimas como las actuales.
Selfie en el Caballo, Valle de Lanjarón de fondo. Crampones y piolet para alcanzar la cumbre, una gozada!
Tras el bocata de rigor en la cúspide del Caballo hacemos el descenso corto (siempre son cortos) pero mágico hasta el valle del Lanjarón, una bajada de las guapas.
Lo bueno si breve...
Y a continuación guapo ascenso desde la cota 2700 del valle del Lanjarón hasta los 3000 metros del Tajo de los Machos, o más bien de la divisoria del Tajo ya que a la misma cima no subimos por las horas, las fuerzas y el hielo que afloraba en esa zona.
Remontada desde el fondo del Lanjarón. El Caballo sigue estando presente al fondo.
Y en las proximidades del Tajo de los Machos, el único punto con nieve completamente helada (venteada)
Desde el Tajo de Los Machos hicimos el mejor descenso del día, solo roto al principio por una zona sin nieve. Por la vertiente sur del Elorrieta nos dejamos caer hasta los 2600, una bajada salvaje, con las Alpujarras como telón de fondo y una nieve excepcionalmente buena.
Zona sur del Elorrieta, una vertiente jalonada de divisorias y vaguadas, un alucine para el esquimo.
Pieles para remontar hasta los Tajos de los Lagunillos, nuevo descenso por una barranquera cortita pero muy bonita, y última transición a pieles para la subida final hasta el Veleta (Telesilla Superior de la Laguna) pasando junto al Puntal de Loma Púa y la puerta de la Carihuela. Ese tramo de ascenso primero lo hicimos por una barranco muy estético que acaba en un pequeño circo rematado en su parte final por una cabecera sumamente empinada que nos dejo las pocas fuerzas que quedaban casi al mínimo, esa cuesta final es la zona más alta de la Loma Púa.
Quemando las últimas fuerzas en una remontada de ensueño...
Y un remate final técnico, de apurar las vueltas marías y las cortas diagonales, esquí de travesía en estado puro! Muy recomendable conocer los límites personales y saber cambiar a crampones a tiempo.
Para acabar descenso con el Sol del ocaso por la siempre disfrutona y larga pista del Águila, que postre más maravilloso!!!
En total 30km y 2300 metros de ascenso acumulado en unas mejorables 11 horas y media de actividad. Ruta altamente recomendable si se dan las condiciones y se posee el nivel adecuado. Aconsejable (casi que obligatorio) todo el material de seguridad y progresión típico de estas actividades ya que se asciende y desciende por todo tipo de orientaciones e inclinaciones.
"Track" analógico de la excursión
Impresionante para los alpinistas de bota dura y nada más los rutones que os pegáis los esquiadores de montaña, que envidia sana.
ResponderEliminarMuy guapo! envidia sana... yo también llevo la temporada a 0 y creo que así la despido,una pena (todo no puede ser) vendrán tiempos mejores!
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