miércoles, 1 de marzo de 2023

DE DÉNIA A EL CAMPELLO EN BICI POR ANTIGUOS TRAZADOS FERROVIARIOS

Desglose de la ruta:
  • Denia-Gandia por el antiguo trazado del tren a Carcaixent. En medio de este tramo se pasó por la Marjal. 40 kms
  • Gandía-Muro de Alcoi por el antiguo trazado del Tren del Inglés. 50 kms
  • Muro-Alcoi por lo que queda en esa zona del tren Xixarra que llegaba desde Alcoi a Cieza. 10 kms
  • Alcoi-Agost por el inconcluso proyecto que intentó unir Alicante con Alcoi con ferrocarril. 60 kms
  • Estación de Agost-El Campello por caminos, calles y carreteras. 30 kms.

Gran ruta en bicicleta, del tirón, disfrutando como niños del camino y del día frío y algo ventoso, pero muy soleado, que despedía por este año a nuestro casi anecdótico invierno. 190 kms. Con dos paradas a mesa puesta (en Potries la primera y en Cocentaina la segunda) y una rebelde avería solucionada con algo de presteza, menos mal. El resto, dar pedales como locos!


Así, durante el último día de febrero, conseguíamos unir las costeras poblaciones de Denia y El Campello, haciendo un arco que comienza adentrándose en la provincia de Valencia y prosigue atravesando el corazón del interior de la provincia de Alicante.

No era la primera vez que seguíamos similar recorrido. El año pasado por estas fechas también unimos ambas poblaciones. Pero en esa ocasión nuestro espíritu "mountain biker" nos hizo decantarnos por tramos más intrincados, alejados de la idea original de seguir los pasos de los antiguos ferrocarriles que surcaban esas zonas.

Este año el objetivo estaba claro, seguir de las manera más precisa posible esas antiguas vías férreas, hoy convertidas, afortunadamente, en vías verdes; unos caminos que ponen en valor un patrimonio increíble que ayuda a explicar muchos aspectos socio económicos de las zonas por las que transitamos. Darse una vuelta por la red de redes y leer algo de lo que hay escrito sobre los antiguos trenes que unían las diferentes comarcas con los puertos marítimos es recibir una sencilla y agradable clase de geografía y ciencias sociales. Por ello ánimo a "perder" un rato en buscar y leer sobre las líneas férreas que a continuación expongo.


Nuestra larga excursión tiene pros y contras. Los pros son la ingente cantidad de paisajes que ves en un día, casi incontables... los contras que las horas pasan de manera implacable y no permiten ese ciclismo lento que te deja parar y recrearte en cada uno de los diferentes escenarios. Es un viaje por nuestra tierra, rápido, casi todo lo que permite una bici, una jornada muy enriquecedora en todos los sentidos y, hecho así, en estilo del tirón, todo un reto deportivo.

Comenzamos en Denia, por el antiguo trazado del tren que unía esa población con Carcaixent. El primer gran objetivo es llegar a Gandía, 40 kms más al noreste, previo paso por El Vergel y Oliva. Entre estas dos poblaciones poblaciones recién mencionadas nos tomamos una licencia casi obligada que nos saca del antiguo trazado férreo. No es otra que recorrer la Marjal de Pego para evitar un tramo del ferrocarril absorbido por la N332. Después de Oliva retomamos la rectilínea vía hasta Gandía.







De Gandía "cambiamos" de tren. Nos subimos al que unía esta ciudad con Muro. Era conocido como el Tren del Inglés. Tras una caótica salida de la ciudad la excursión vuelve a coger forma. Aquí el patrimonio está bastante descuidado y salvo que uses dispositivo GPS se hace casi imposible reseguir los pocos tramos que quedan de aquel recorrido que en su día vio mover miles de toneladas de materias primas y diferentes productos manufacturados, así como unos pasajeros que, camino de Alcoy, y debido al esfuerzo que realizaba las máquinas de carbón para superar los desniveles, cuentan las crónicas que llegaban con la cara negra del intenso humo y calor que se respiraba en los vagones. 

En nuestro camino dejamos atrás Almoines, Potries y Villalonga, pueblos rodeados de naranjos y fábricas, para adentrarnos en una de las zonas de montaña más sorprendentes de nuestra geografía provincial, la del encañonamiento del Río Serpis a la altura del Racó del Duc. Estamos a los pies de la Safor y el trazado del tren, y sus diferentes túneles permite pasear por una zona intrincada de increíble belleza. Pasamos Lorcha y vuelven las llanuras de cultivos, esta vez el secano es el que se impone, almendros y olivos marcan el paisaje que preside el Benicadell. Un largo túnel nos deja en Beniarres. Luego un agradable camino asfaltado nos lleva hasta Gaianes. Y ahí nos permitimos una segunda y última licencia.







De Gaianes abandonamos momentáneamente la ex-vía del tren para rodar por las cercanías de la Albufera de Gaianes. Unos rápidos caminos nos llevan al Rio d'Agres. Circulando junto a su cauce disfrutamos de unos kilómetros de un sendero de ensueño que nos deja a los pies de Muro. Retomamos nuestro "férreo" camino y entramos en este bonito pueblo de l'Alcoiá. Aquí la otrora importante parada del tren sigue en pie. La dejamos atrás y nos vamos camino de Cocentaina; tras una rápida comida, llegamos a la capital de la comarca, la siempre imponente ciudad de Alcoi. 









Alcoi la pasamos rápido, el tiempo apremia y aún nos queda camino. Nos dirigimos hacia el barrio de Batoy. En las inmediaciones del Collao retomamos nuestra tercera vía de ferrocarril. En esta ocasión un proyecto de trazado que a pesar de haberse ejecutado nunca vio a un tren circular. 60 kms de plataforma, plagada de grandes viaductos y largos túneles. Uno de esos costosos proyectos que que quedó en eso. Afortunadamente hay tres tramos a los que hoy se les da ha dado el valor que merecen. Estos son las vías verdes de Alcoy y la del Maigmo y un corto y agradable paseo en las inmediaciones de Ibi. Ojalá los otros dos tramos que aún perduran sin haber sido arreglados, los que unen Ibi con Castalla, y Castalla con el Maigmo, se respeten y reciban el trato que merecen. 

En esos 60 kilómetros que unen Alcoi con la estación de Agost nuestros molidos cuerpos disfrutaron del espectáculo del atardecer a la par que del increíble circular por sitios del todo apasionantes. Cada uno de los kilómetros merecería unas palabras, recorrer la Font Roja por las entrañas de la tierra y la Foia de Castalla por esos caminos y vericuetos que ofrece el inconcluso trazado ferroviario es una maravilla par los sentidos. Por no hablar de la gozada de hacer la vía verde del Maigmó cuesta abajo, a todo trapo, con el rojizo del ocaso.















Tras visitar la estación de Agost nos metemos por unos caminos polvorientos que nos dejan en la carretera de la Cañada del Fenollar. Hace rato que nos alumbran nuestras linternas. Un buen carril bici nos lleva hasta Sant Vicent del Raspeig. Y ahí comienza una batalla contra los vehículos de 4 ruedas camino de Campello. Salimos indemnes que no es poco. De refilón tocamos San Juan de Alicante. Volvemos a luchar un poco y tras rodear el Hospital (a punto estamos de entrar a que nos ingresen, no se si en psiquiatría) cogemos unos agradables caminos de Benimagrell, Fabraquer y La Font que nos llevan a nuestro destino final.


190 kms y casi 1500 metros de desnivel en compañía de Miguel y Fran que me han sabido a gloria bendita. con Fran ya son muchas, a Miguel no lo conocía, buen rito iniciático, si repite es porque está igual de loco que nosotros. Llegando al final les propongo seguir un pelín más hasta dejar la cifra de kilómetros recorridos en dos centenas redondas y a punto están de apedrearme. Muy buena ruta que, realizada del tirón, requiere de paciencia y resistencia a partes iguales. 

Igual de paciencia que tendremos que atesorar si queremos usar el trasporte ferroviario actual para ir del punto final al inicial. Prepara 2 horas y 45 minutos de sosegado viaje en el Tram para unir El Campello con Denia. Algo inconcebible cuando en coche se tarda poco más de 50 minutos. ¿Será esa lentitud una de las razones por la que tantos trenes terminen como terminaron aquellos que nos dejaron sus infraestructuras para el paseo que acabo de exponer?



Dejo enlace a Wikiloc para poder descargar la ruta fácilmente... De Denia a El Campello por vías verdes

miércoles, 15 de febrero de 2023

Jhesus y Virginia Diez al Peñón d'Ifac

Otra jornada bien apurada, con una nueva aventura de andar por casa después de trabajar, recorriendo partes de la pared que desconocíamos o que llevábamos tiempo sin transitar. Volvemos al Penyal, hay que aprovechar los pocos días fríos que tenemos por estas latitudes para escalar en un muro que, de normal, a esas horas a la que le entramos, se asemeja más a una sartén que a un agradable muro para escalar; hoy vamos en manga larga e incluso con chaqueta en varios momentos, dentro de unas semanas, cuando nos asemos de calor, lo recordaremos con nostalgia...

Con Lorenzio, el controlador del paseo. Increíble el conocimiento que tiene de la pared y sus vías sin haber escalado ninguna de ellas! 

Vamos a la zona de la Valencianos. Tenía en mente la vía Jhesus desde que la restauraron; siempre es bueno recordar a los colegas que ya no están. Jesús Ruiz fue mi jefe durante varios años y con el compartí alguna que otra escalada. Una pieza muy importante a la hora de entender nuestro juego aquí, en las paredes de Alicante. Muchas rutas del Cabeçó, Ponoig y Penyal llevan su firma, una de ellas la Jhesus, bautizada por el mismo con su apodo de batalla.

Las dos mejores fotos que guardo de Jesús. Esta en la Espejismos del Ponoig

Y esta en la que se le ve con todo el sosiego del mundo. Habíamos escalado Las Hadas, también en el Ponoig

Así que empezamos por la Jhesus. El primer largo no es muy aconsejable. Desoyendo a mi compañera acabo sucumbiendo al morbo de lo cutre y le doy. Salgo bien parado del envite. Esther, recuperando los seguros arranca un cacho de fisura, en contreto uno donde me había protegido con un alien...

Reseña de Álvaro con la Jhesus 

Y del mismo autor la reseña que intenta descifrar el super enjambre de vías que surcan este contrafuerte E de la pared principal del Penyal


Arrancando junto a la Valencianos, por la que yo creía que era la Jhesus, erré, era más a la izquierda pero la base de la otra fisura, la fisura original, se antojaba criminal para estar asegurando

Aquí ya había protegido para no irme al suelo, la cuestión es que lo marcado con un círculo se lo llevó mi compi

El L2 lo hacemos por Polvos Mágicos y su excepcional diedro acristalado. Una maravilla de la geología que te acaba poniendo en tu sitio, con unos últimos pasos de lo más cachondos (por llamarles de alguna manera).

Luchando para no perder la elegancia, practicar patinaje sobre hielo sobrevuela a cada instante


Seguimos unos metros de repisa de La Valencianos y al acabar la cadena y los escalones nos encaramamos a la izquierda, por unas fisuras; un cordino marca el camino a seguir. Luego nada, incertidumbre. Sigo con tiento hacía otra fisura. Una hermosa lavanda tapa un súper agarre que me devuelve la confianza. Protejo a discreción y salgo de una fisura algo peleona a una placa y, ohh! Sorpresa!! Restaurada?? Encuentro dos buriles de la primera ascensión y un parabolt de los 90. Trago saliva, me acuerdo de los "restauradores" y de algún familiar cercano a ellos durante un buen rato y salgo de allí de la manera más elegante posible (más me vale). Esther flipa con el largo al recuperarlo. Muy bueno pero de andar con mucho cuidado sobre todo si el óxido sigue presente en los inseguros seguros fijos del largo.

Terminando el L3, largo clave de Jhesus.

Ya es tarde y se me cruza el cable...por hoy ya está bien de placa. Enganchamos la diagonal superior de la Directa UBSA y la seguimos hasta toparnos nuevamente con el inicio del diedro final de Polvos mágicos. De ahí cambiamos de tercio y nos metemos en el pilar desplomado que cierra el contrafuerte E por su derecha.

Llegando al diedro final de Polvos Mágicos, después de haber recorrido en diagonal todo el frontón final de la Valencianos aprovechando en parte la Directa UBSA 

Tras unos metros por la Polvos desvío a derechas para seguir por la excepcional Virginia Diez. Y para convertirla en excepcional vuelvo a desoír a mi compi y cuál tractor asciendo en uno los dos largos que componen este super rutón, festival de caliza al cuerpo! No me reprimo y cuando alcanzo la reunión superior me asomo al vacío y grito. Un grito de placer que un ratito después repite mi compi. Y es que pedazo de vía la Virginia Díaz... lo bueno si breve dos veces bueno. Un auténtico festival de agarres redondos, cazos, buenos pies y algún que otro paso curioso.

Foto topo de la Virginia

El que escribe, con el diedro al revés por culpa de la autofoto

Y en esta como toca, con todo el vacío, el Peñón y el mar a nuestros pies


Alcanzamos la cima, reímos con unas polacas que pasan por allí y, tras plegar la cuerda y calzar las zapas, volvemos a bajar con las últimas luces, flipando con todo lo que tenemos al lado de casa. 

Buenas escaladas!!

viernes, 3 de febrero de 2023

La SAME del Penyal al atardecer

La SAME es una vieja conocida de esta polvorienta página. Por ello no me extenderé mucho. La anterior ocasión, con Borja, la terminamos de noche y por ello las fotos que salieron fueron pocas y pobres, pero el relato merece la pena ... SAME nocturna 2019


En esta ocasión, con Esther, la hemos hecho también por la tarde pero acabando a la hora feliz, la hora de oro como leí hace poco, esa en la que la belleza del rojo crepuscular te acaba embriagando... mirar al horizonte y embelesarte es de las mejores cosas que nos ofrece la escalada en paredes que miran a poniente... 

Una imagen vale más que 1000 palabras

La SAME es una clásica de clásicas, un monumento de la escalada en tapia, una grande de escalada obligada para cualquier amante de estos terrenos. Un recorrido lógico de principio a fin gracias a sus continúas fisuras y diedros. La vía es del todo espectacular. 

Topo guía 

Explicación sucinta de la ruta, del tirón. Una piada de la SAME sin hablar de sus largos quedaría muy descafeinada. La vía arranca con un diedro tumbado diagonal que te pondrá en la pista. Se empina en el L2, con unos pasos difíciles y difíciles de reseguir. En el L3 se vuelve a complicar con un diedro peleón. En el cuarto largo se descansa. Y en el L5 encontraremos la joya que venimos buscando, largo clave sin duda alguna; una sucesión de agujeros y fisuras desembocan en el famoso diedro-chimenea que te acaba tragando en sus fauces. En el L6 volvemos a ver la luz, y toda la pared SO. Y en L7 unos tubos de órgano nos depositan en la cresta de la Valencianos. Escalaremos la cresta y otros dos largos de la Valencianos. El pulido del terreno nos marcará el camino...

Y unas fotos de lo explicado en el anterior párrafo...

L1 y 2 del tirón, hasta el infinito y más allá!!

Últimos pasas del L2

L3

L5, con lo peor a mis pies, un paso más y entras en el interior del Penyal 


En las fauces de la tierra


Y saliendo de diedro acuevado! Espectacular!!


Atardecer en la cresta de la Valencianos, con la Serra Gelada, Benidorm, el Puig Campana, Morro de Toix y Bernia de fondo

Y en la cima, con la luna en cuarto creciente pasado

Siluetas a contraluz!

Para aproximar basta con aparcar junto al puerto, recorrer todo el Paseo Príncipe de Asturias hasta topar con la pared y reseguir su base hasta sobrepasar el inicio de la Gómez Cano. Una vez pasado el estrechamiento nos separaremos de la pared y buscaremos una bajada. La traza está casi perdida. Vamos a media ladera hasta volver a estar cerca de la pared. Un gran bloque nos cierra el paso. Trepamos por su lado y estaremos en el pie de vía. Es el acceso más largo del Penyal.

El descenso es claro y evidente. Seguiremos el hiper mega transitado sendero, llamado por las autoridades senda roja.

Vía semiequipada. Reuniones con tres seguros. Para los largos necesitaremos un juego básico de friends (semáforo de aliens y de camalots) y fisureros. 

Y eso es todo! Buenas escaladas!!


ÚLTIMA AVENTURA...

Esquí de montaña en Suiza. Pic Chaussy, 2351 m y Dent de Morcles, 2968 m

Una de nieves, de Alpes y de un país que solo conocía de refilón... Esta corta salida que ahora relato a las montañas suizas surge de la noc...