La SAME es una vieja conocida de esta polvorienta página. Por ello no me extenderé mucho. La anterior ocasión, con Borja, la terminamos de noche y por ello las fotos que salieron fueron pocas y pobres, pero el relato merece la pena ... SAME nocturna 2019
En esta ocasión, con Esther, la hemos hecho también por la tarde pero acabando a la hora feliz, la hora de oro como leí hace poco, esa en la que la belleza del rojo crepuscular te acaba embriagando... mirar al horizonte y embelesarte es de las mejores cosas que nos ofrece la escalada en paredes que miran a poniente...
La SAME es una clásica de clásicas, un monumento de la escalada en tapia, una grande de escalada obligada para cualquier amante de estos terrenos. Un recorrido lógico de principio a fin gracias a sus continúas fisuras y diedros. La vía es del todo espectacular.
Explicación sucinta de la ruta, del tirón. Una piada de la SAME sin hablar de sus largos quedaría muy descafeinada. La vía arranca con un diedro tumbado diagonal que te pondrá en la pista. Se empina en el L2, con unos pasos difíciles y difíciles de reseguir. En el L3 se vuelve a complicar con un diedro peleón. En el cuarto largo se descansa. Y en el L5 encontraremos la joya que venimos buscando, largo clave sin duda alguna; una sucesión de agujeros y fisuras desembocan en el famoso diedro-chimenea que te acaba tragando en sus fauces. En el L6 volvemos a ver la luz, y toda la pared SO. Y en L7 unos tubos de órgano nos depositan en la cresta de la Valencianos. Escalaremos la cresta y otros dos largos de la Valencianos. El pulido del terreno nos marcará el camino...
Y unas fotos de lo explicado en el anterior párrafo...
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